Oficinas, tiendas y establecimientos de hostelería en España ya no podrán ajustar sus sistemas de refrigeración por debajo de los 27 grados Celsius (81 grados Fahrenheit) en verano ni elevar la calefacción por arriba de los 19 grados C (66 grados F) en invierno, según una nueva serie de medidas de ahorro de energía aprobadas el lunes.
Las tiendas también estarán obligadas a mantener las puertas cerradas, y los sistemas de calefacción deben revisarse con mayor frecuencia a fin de aumentar la eficiencia bajo las nuevas medidas, dijo la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera.
Estas incluyen apagar las luces de los escaparates de las tiendas después de las 10:00 de la noche. El alumbrado público no se verá afectado.
El gobierno aprobó el proyecto de ley como parte de un intento por reducir el consumo de gas del país en un 7%, en apego a los recientes acuerdos energéticos de la Unión Europea para limitar la dependencia del gas ruso por la guerra en Ucrania.
Ribera dijo que las medidas se mantendrán en principio hasta noviembre de 2023.
Las instituciones públicas españolas ya operan regulaciones similares de ahorro de energía.
El gobierno explicó que las medidas no sólo ahorrarán energía sino que también reducirán las facturas de los hogares y las empresas.
España es uno de los países europeos más calurosos durante el verano. El país ya ha registrado dos olas de calor este año con temperaturas que con frecuencia superan los 40 grados C (104 grados F) por varios días seguidos. Se prevé que las temperaturas vuelvan a subir en las primeras semanas de agosto.
Fuente: AP