El Canciller israelí, Gideon Saar (@gidonsaar), ha emitido una fuerte declaración tras el reciente atentado terrorista perpetrado contra un evento judío de Janucá en Australia. Saar expresó su profunda consternación ante el ataque, calificándolo como un suceso «lamentablemente previsible». Sus comentarios surgen en un contexto de creciente preocupación global por el aumento de la violencia y el discurso de odio dirigidos a la comunidad judía.
El Canciller argumentó que la previsibilidad de este acto violento se debe a la permisividad con la que, según él, se han llevado a cabo manifestaciones antisemitas en las calles de Australia durante los últimos dos años. Según la declaración de Saar, estas protestas han incluido cánticos que piden «globalizar la intifada», una retórica que, a su juicio, tiene consecuencias directas y palpables en la seguridad de la comunidad judía.
El análisis del Canciller subraya un punto crucial: la retórica de odio y la incitación a la violencia en las manifestaciones públicas eventualmente se traducen en acciones concretas. Saar afirmó que la amenaza contenida en los cánticos de «globalizar la intifada» es, lamentablemente, «exactamente lo que pasó», sugiriendo una conexión directa entre el discurso de las protestas y la ejecución del ataque terrorista contra la celebración festiva.
Este atentado en un evento tan significativo como Janucá, la Fiesta de las Luces, resalta la necesidad urgente de tomar medidas firmes contra el antisemitismo en todas sus formas. La condena de Gideon Saar no solo ofrece solidaridad, sino que también sirve como una llamada de atención a las autoridades australianas y a la comunidad internacional para que actúen de manera decisiva para proteger a las comunidades de la diáspora de la incitación al odio y los actos de terror.
