El gobierno de China se ha pronunciado en contra del despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe. Mao Ning, la portavoz del Ministerio de Exteriores chino, declaró que estas acciones violan la soberanía de otros países y amenazan la paz y la estabilidad de la región.
En un comunicado, Pekín fue claro en su postura: se oponen a cualquier acción que infrinja la soberanía y seguridad de otras naciones. «Nos oponemos al uso o la amenaza del uso de la fuerza en las relaciones internacionales y a que potencias externas interfieran en los asuntos internos de Venezuela bajo cualquier pretexto», sentenció la portavoz.
El gigante asiático también hizo un llamado directo a la administración de Donald Trump para que «haga más cosas que contribuyan a la paz y la seguridad en América Latina y el Caribe». Esta declaración se suma a las recientes críticas de Venezuela y otros países de la región, que ven el despliegue como una provocación.
Según un funcionario estadounidense, el operativo a gran escala involucra alrededor de 4.000 marines, así como aviones de vigilancia, varios buques de guerra y un submarino de ataque. La escalada de tensión entre Estados Unidos y sus adversarios en la región continúa en aumento, ahora con la voz de China sumándose al debate.
