«La situación de las cuencas productoras de agua y electricidad del país están en una situación bastante difícil, tanto por efectos de deforestación como por efecto en algunos casos de mal manejo de cuencas por la presencia de minería o situaciones en las cuencas que no debería ocurrir», advirtió el 25Mar, el ambientalista y Coordinador General de Clima21- Ambiente y Derechos Humanos, Alejandro Álvarez, sobre los efectos que podría estar causando este tipo de actividad en la cuenca del río Caroní y por ende en la generación de electricidad en el país.
Explicó que ya desde fines del siglo XX se tenía preocupación por los efectos de la minería en la zona del Alto Caroní, por el arrastre de sedimentos hacia el embalse, lo que hace que este sea cada vez menos profundo y haya menos fuerza motriz del agua para mover las turbinas.
«Han ocurrido cosas en simultáneo, aumentó la minería ilegal y ahora conocemos menos lo que está sucediendo porque la minería en Venezuela ha venido decayendo, pero podemos hacer una presunción sobre la base del conocimiento que tenemos, dos de las subcuencas del Caroní, la de Carabú, al sur del Parque Nacional Canaima, y la del río Paragua, están siendo muy intervenidas por la minería ilegal», detalló en entrevista para Unión Radio.
Asimismo, sostuvo que el cambio climático incide en una medida difícil de decir porque es un proceso continuado que ocurre a lo largo del tiempo en períodos muy largos.
En ese sentido, precisó que fenómenos como El Niño o La Niña, que antes estaban más distanciados en el tiempo, ahora ocurren con mayor cercanía. S
