Los edificios destinados a los sectores salud y educación deben ser adecuados para soportar sismos de hasta 7 grados en la escala de Richter, según los estipulado en las normas sismorresistentes incluidas en las directrices Covenin 17/56, actualizadas en el año 2020. No obstante, esos trabajos no se han ejecutado, expresó el presidente del Colegio de Ingenieros del estado Lara, Julio Gutiérrez.
La declaración la ofrecióal ser preguntado a propósito del enjambre sísmico ocurrido hace mes y medio que dejaron algunos daños en instalaciones escolares, entre éstas la Francisco Javier, Leonardo Ruiz Pineda, a oeste de Barquisimeto, así como en el municipio Torres.
Explicó el Colegio funciona la Comisión de Infraestructura de Servicios Públicos, que conjuntamente con Funvisi y la Cámara de la Construcción llevaron a cabo la microzonificación sísmica en 2010 y se determinó que existen varias edificaciones que necesitan reforzamientos para adaptarse a las nuevas tecnologías y normas sísmicas, sin precisar la cantidad.

El ingeniero destaca que los municipios Iribarren y Palavecino del estado Lara, así como el municipio Libertador, capital de la gran Caracas, son los únicos tres municipios de la 335 del país que poseen una microzonificación sísmica y una ordenanza. Pero, sigue pendiente realizar las adecuaciones, que consisten en reforzar las bases de las edificaciones. Esos trabajos los debe realizar el Gobierno nacional a través de la Fundación de Edificaciones y Dotaciones Educativa (FEDE), institución adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Educación, encargada de es construir, rehabilitar y mantener la infraestructura y la planta física de los planteles educativos en el país, destacó Gutiérrez,
Lara entre zonas de riesgo
Por otra parte, según Funvisi, el 70 % de los cerca de 28.000 planteles escolares en Venezuela se encuentran ubicados en zonas de alta amenaza sísmica. Además, aproximadamente el 46 % de los 18.685 planteles registrados e integrados en un sistema de información geográfica fueron edificados siguiendo normas antiguas que no cumplen con las exigencias sismorresistentes establecidas en las regulaciones actuales.
Entre las regiones del país que requieren de mayor dedicación y orientación de recursos para la gestión del riesgo sísmico en edificaciones escolares de Venezuela en la cual la mayor prioridad regional (mayor riesgo sísmico) la obtuvieron los estados Miranda, Portuguesa, Anzoátegui, Sucre, Carabobo y Lara.
Ello releja la vulnerabilidad de los edificios, asociada a las características estructurales básicas de las edificaciones escolares como el año de construcción y el número de pisos. ac