Los científicos han conseguido que cerdos con el pene lesionado vuelvan a experimentar erecciones normales con la ayuda de un trasplante de tejido biónico, un logro que podría allanar el camino a nuevos tratamientos de la disfunción eréctil en humanos, informa un nuevo estudio.
La nueva investigación se centró en la túnica albugínea, una estructura estratificada del interior del pene que interviene directamente en el proceso eréctil. Un equipo dirigido por especialistas en biomedicina de la Universidad Tecnológica del Sur de China (SCUT) logró fabricar una versión artificial de la túnica albugínea con hidrogel, que utilizó con éxito para parchear tejidos peneanos dañados en cerdos miniatura Bama.
Millones de personas sufren algún tipo de disfunción eréctil que dificulta su capacidad para lograr o mantener una erección. Algunas de estas afecciones, como la enfermedad de Peyronie, están causadas por lesiones que afectan a la túnica albugínea, un tejido muy elástico y de doble capa que facilita la transición de blando a firme durante una erección.
Los científicos han experimentado la reparación de la túnica albugínea con material biológico trasplantado, pero estos parches naturales a veces son rechazados por el sistema inmunitario del huésped. Para evitar este problema, el equipo de SCUT desarrolló un parche artificial de hidrogeles meticulosamente esculpido en patrones que imitan a su homólogo real.
Tras una serie de experimentos con penes de cerdo desprendidos, piel de rata y sangre fresca de conejo, el equipo logró crear una «delicada estructura» que «es biocompatible y tiene un efecto positivo en las lesiones de la túnica albugínea del cerdo», según un estudio publicado el miércoles en la revista Matter.
«Inspirándonos en la delicada estructura adaptable a la deformación de la túnica albugínea natural, proponemos una túnica albugínea artificial (ATA, por sus siglas en inglés) compuesta por un hidrogel rígido a la deformación formado por fibras alineadas pero onduladas», explican los investigadores en el estudio.
«La ATA posee varias características mecánicas clave de la túnica albugínea natural», añaden. «Además, el ATA es capaz de reparar lesiones y restablecer la función eréctil normal del tejido del pene dañado por la TA en un modelo porcino. Nuestro estudio demuestra que el ATA es muy prometedor para la reparación de lesiones peneanas».
En otras palabras, los cerdos que recibieron estos parches fueron capaces, en su mayoría, de volver a tener erecciones normales. Los resultados apuntan a un nuevo tratamiento prometedor para las personas que sufren daños en la túnica albugínea, que pueden dar lugar a penes inusualmente curvados y erecciones dolorosas.
Sin embargo, habrá que seguir investigando para saber cómo funcionaría el parche artificial en humanos. Aunque los autores señalan en el estudio que el «cerdo miniatura Bama no tiene espina peniana aparente y el tamaño del pene es similar al de los humanos», sigue habiendo diferencias significativas entre los órganos de las dos especies que habrá que investigar.
Mientras tanto, el éxito preliminar del trasplante artificial en cerdos podría inspirar una serie de aplicaciones relacionadas, como dispositivos vestibles, sensores implantables y otras tecnologías biomédicas.
«La estrategia para construir ATA podría extenderse a construcciones biomiméticas de diversos materiales y otros tejidos de carga, como vasos sanguíneos, intestino, córnea, vejiga, tendones y miocardio», concluye el equipo. «El pene de los mamíferos está controlado por el flujo sanguíneo para una rápida transición blando-duro, y este ATA biónico podría inspirar el desarrollo de robots blandos accionados por fluidos».
ENLACE ORIGINAL: Scientists Have Developed Bionic Penis Augments to One Day Treat Erectile Dysfunction (vice.com)
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